Regalar un espejo de mano es como meterse dentro del bolso de alguien, pero con una invitación para que se comprenda. * No sabes cuánto le duele haberte arrojado a los pies de tus caballos, intentó avisarte, pero la luz les encandiló. Parece que lo que ilumina no siempre muestra el camino. * Del invierno pasado no logra recordar cómo se abrigaba, debe transcurrir primero el frío porque la necesidad hace a la memoria.